Otra interesante escapada de senderismo no lleva hasta Burujón, un pequeño pueblo situado a escasos 20 kilómetros de Toledo capital. Aquí nos encontramos con uno de los más desconocidos y bellos rincones naturales de la provincia toledana: las Barrancas de Burujón. Un conjunto de cortados y cárcavas de color rojizo, modelado a lo largo de siglos por la erosión del viento y el agua, conforman este bello paraje en el sinuoso cauce del río Tajo. Sus cortados se extienden aproximadamente sobre un kilómetro de longitud y su pico más alto, el Cambrón, supera los cien metros de altura.
A los pies de las Barrancas se encuentra el embalse de Castrejón, que convierte este paraje en un estupendo refugio para conejos, liebres y numerosas especies de aves: cormoranes, garzas, azulones y martinetes conviven en la zona. Además, encontramos una buena vegetación con olmos, fresnos, chopos y alisos. Para apreciar mejor la belleza de este lugar y recorrerlo en orden y con mayor seguridad, hay trazada un ruta llamada “Senda Ecológica de las Barrancas”. Transitando por la senda, encontramos varios miradores protegidos con barandillas y habilitados con paneles informativos, desde donde podemos contemplar mejor los espectaculares cortados, el embalse, su flora, fauna…
Si vamos con tiempo, es interesante también, acercarse a visitar el precioso castillo de Guadamur, situado a media hora en coche en dirección Toledo capital.